Adivina quien soy

Me crié en un club que en los últimos años ha coqueteado varias veces con la 2ª división de mi país natal, incluso bajando 2 veces. Tras salirme en las categorías inferiores, el míster del primer equipo, ex jugador de 1ª división, decidió subirme a la primera plantilla y me dio la oportunidad de disputar muchísimos partidos como titular. Con solo 22 años ya era sub capitán del equipo y, con 23, debido a la retirada del 1r capitán, la plantilla confía en mí y me otorga el brazalete definitivamente. Siempre soné para ser convocado con la nacional pero nunca nadie confío suficiente en mí como para darme la oportunidad. Tras 5 temporadas siendo titular indiscutible decidí hacer la maleta y volar a un futbol más físico que el de mi liga. Mi club necesitaba dinero y esos 4 millones de euros le fueron muy bien. En mi nuevo país no pude debutar mejor, contra uno de los clubs importantes y ganando 3-2. Metí un gol, di una asistencia e inicié la jugada de otro. A pesar de esto, jugué solo 25 partidos y no se acabó de creer en mí. Esta temporada mi club y otro han hecho un cambio de cromos y he vuelto a cambiar de país. Al menos, un poco más cerca de casa. Tendré la dificilísima misión de hacer olvidar a los 2 cracks de mi nuevo equipo que decidieron abandonar la disciplina del club, uno para seguir en la misma liga y el otro para ocupar mi puesto en mi antiguo club.